Viajar con tu mascota, especialmente con tu perro, puede ser una experiencia muy divertida y satisfactoria, sin embargo, es importante prestar atención a ciertas medidas de seguridad que ayudarán a que todos los pasajeros viajen seguros.
La DGT, de hecho, cuenta con una normativa que ha tenerse en cuenta, ya que las multan pueden oscilar entre los 100 y 200 euros en el caso de que se circule sin tomar en consideración ciertas medidas preventivas. Aprovechando el Día de la mascota que se celebra el 21 de julio, te indicamos algunos puntos para viajar con tu amigo de forma segura:
- Sistema de retención. No, no se trata de una sillita como la de los bebés, pero sí cumple el mismo cometido. Los perros no deben ir sueltos por el habitáculo, ya que pueden interferir en la conducción y visibilidad, además, en caso de accidente podrían sufrir heridas y complicaciones, como cualquier otro pasajero. Por este motivo existen arneses que se enganchan en los asientos traseros y que les permiten viajar con mayor seguridad.
- Trasportín. Los perros de menor tamaño, así como los gatos, conejos u otros animales de compañía de pequeña talla, deberán ir en su trasportín, que tiene a su vez que ir bien sujeto al asiento para evitar que se mueva durante el recorrido.
- Redes separadoras. Cuando el perro alcanza un tamaño suficientemente grande como para no poder ser retenido mediante el arnés, y siempre que el vehículo lo permita, existen mallas que, colocadas en la parte trasera del coche, separan la zona del animal del resto de pasajeros, con el fin de garantizar la mayor seguridad y comodidad para todos.
Una vez que tenemos en cuenta los medios para proteger el viaje, es importante prestar atención a algunas prácticas que ayudarán a que el recorrido sea lo más satisfactorio para todos. En este sentido se recomienda, sobre todo si la mascota tiende a marearse, administrarle un antiemético, que ayuda a evitar vómitos.
Por otro lado, igual que hacemos paradas cada dos horas para desconectar, descansar y airearnos, con los animales es igual. Necesitan salir del coche, estirarse y tomar aire fresco para continuar el viaje más relajados.
Y para terminar, nada mejor que ofrecerle un premio. Darle alguna de sus chucherías preferidas hará que al llegar al destino estén más receptivos, y no sientan tanto el cambio de hogar. Ahora nuestra mascota podrá disfrutar con el resto de la playa, la montaña o el destino que hayamos elegido.