A lo largo de los años, se han ido añadiendo a nuestros vehículos muchos elementos que facilitan y mejoran la conducción. Uno de estos elementos es la dirección asistida. Esta nos ha permitido un mayor manejo del volante, ya que antiguamente se tenía que ejercer una mayor fuerza para realizar cualquier tipo de movimiento. Es por ello que, desde Midas, os traemos las principales ventajas de la dirección asistida, así como una explicación de sus tipos, el mantenimiento necesario y los posibles síntomas de avería.
¿Qué tipos de dirección asistida existen?
Para conocer más a fondo este elemento, debemos saber que existen diferentes tipos de sistemas de dirección asistida. En la actualidad, existen tres formatos: dirección hidráulica, dirección eléctrica y dirección electro-hidráulica.
Dirección Hidráulica:
Este tipo de sistema utiliza el fluido hidráulico, clave a la hora de refrigerar y lubricar las piezas móviles, para enviar la fuerza adicional que se genera en el volante a las ruedas del vehículo. A través de una bomba de dirección se envía el fluido hidráulico hacia uno de los lados del cilindro, que a su misma vez activa un pistón que mueve las ruedas. Pese a ser el sistema más utilizado, este sistema puede perder eficiencia en términos de consumo y requiere de un mantenimiento adecuado.
Dirección electro-hidráulica:
Esta dirección es la evolución de la dirección hidráulica y funciona de manera muy similar. La principal diferencia de este sistema es que en vez de usar una bomba hidráulica que se conecta con el motor, se utiliza un motor eléctrico para accionar la bomba hidráulica. Esta dirección es la que menos problemas ofrece, ya que no depende de los problemas asociados a la correa de transmisión. Además, ofrece una reducción de consumo de combustible.
Dirección eléctrica:
En este caso, en vez de utilizar un fluido hidráulico, se utiliza un motor eléctrico para ayudar con los movimientos del volante. Mediante el uso de unos sensores, la centralita del vehículo detecta la fuerza que se aplica en cada momento y se ajusta el nivel de asistencia necesario. La dirección eléctrica es el sistema más eficiente y que menos mantenimiento necesita de la actualidad.
Beneficios de la dirección asistida
Los beneficios que proporciona la dirección asistida en los coches modernos son muchos, y por eso, a continuación, vamos a destacar los principales:
- Menor esfuerzo: la principal ventaja de este elemento es la reducción del esfuerzo necesario para realizar cualquier giro de volante, lo que facilita sustancialmente las maniobras a realizar durante cada trayecto.
- Comodidad: debemos resaltar que, gracias a reducir el esfuerzo del conductor, se consigue mejorar la comodidad durante nuestros desplazamientos, especialmente en viajes largos.
- Seguridad: otro de los beneficios que aporta la dirección asistida se da en la seguridad al volante, ya que nos permite una respuesta más rápida ante cualquier imprevisto en la carretera. Por último, cabe destacar que la dirección asistida nos facilita mucho la labor de aparcamiento debido a su reducción de rigidez del volante.
Mantenimiento de la dirección asistida
Como ocurre con todos los elementos de nuestro coche, debemos realizar un correcto mantenimiento de los mismos y así garantizar nuestra seguridad y la de quienes nos rodean.
“Es de vital importancia seguir las indicaciones del fabricante y acudir a las revisiones”
Para ello, tenemos que seguir las indicaciones del fabricante de nuestro vehículo y acudir a las revisiones que se nos indiquen. A pesar de esto, podemos chequear de manera manual elementos como el nivel de fluido, posibles fugas, daños en los componentes eléctricos o actualizaciones de software (estas dos últimas solo se aplican en caso de contar con una dirección eléctrica).
Si estás buscando una opción de calidad para realizar tus revisiones, en Midas tienes a tu disponibilidad La Revisión Oficial Midas. Esta revisión se lleva a cabo conforme a las especificaciones del Libro de Mantenimiento del fabricante y es exactamente igual que en el concesionario, pero hasta un 40% más barata. Además, La Revisión Oficial Midas está garantizada para todas las marcas y modelos.
Síntomas de averías
Ante cualquier sospecha de avería en tu dirección asistida, te recomendamos que acudas a tu taller a la mayor brevedad posible. Sin embargo, hay varios signos que nos pueden indicar un posible fallo.
Mayor resistencia al girar el volante:
Si te da la sensación de que el volante requiere más esfuerzo de lo normal a la hora de realizar giros, podríamos estar ante un signo prematuro de desgaste de la dirección asistida.
Ruidos al girar:
Si tu coche realiza ruidos raros al girar el volante, probablemente estemos ante un síntoma de avería en el sistema.
Vibraciones en el volante:
Si el volante comienza a moverse de manera irregular o notas que no para de temblar, podría significar un problema con tu dirección asistida.
Desviación del vehículo:
Si notas que tu vehículo se desvía hacia algún lado sin aplicar ninguna fuerza en el volante, podría estar relacionado con algún problema en tu sistema de dirección asistida.
Testigos en el tablero:
Por último, si se enciende algún testigo en tu salpicadero, el coche te estará indicando que sufre alguna avería y tendrás que seguir los pasos que se indiquen en el manual de instrucciones de tu coche, dependiendo de si el testigo es rojo o amarillo.
Otros posts del Blog de Midas que pueden resultarte interesantes: